¿El cigarro electrónico es malo?

A pesar de que desde un principio la llegada de los cigarrillos electrónicos a nuestra sociedad supuso una oportunidad de mejora de calidad de vida para aquellos que han sido siempre fumadores (o que lo fueran a ser), cuando el uso de este se comenzó a expandir, llegaron muchas leyes que buscaban su regularización. Algunas de estas leyes actuaban sin fundamentos claros dada la falta de estudios que se tenían acerca de los cigarrillos electrónicos. Incluso en Argentina, en el año 2011, prohibieron la importación, distribución, comercialización y publicidad de estos, además de vedar la venta de todo tipo de accesorios (ABC, 2011). 

En el año 2014, se añaden los cigarrillos electrónicos en la Ley 28/2005 de medidas sanitarias frente al tabaquismo y reguladora de la venta, el suministro, el consumo y la publicidad de los productos del tabaco del BOE, compartiendo así las mismas prohibiciones a las que se habían enfrentado los cigarrillos comunes (como su publicidad o el consumo en la mayoría de lugares públicos). Así pues, esto es causa de una equiparación a los riesgos del tabaco. 

Entonces, ¿el cigarro electrónico es malo? A día de hoy, sí disponemos de estudios que demuestran que el vapeo no sólo es mejor que el consumo del cigarrillo clásico, sino que supone numerosos beneficios.

Vapear o fumar: estudios

Mediante varias investigaciones y estudios sobre el vapeo, vamos a descubrir si realmente es tan malo vapear.

Reduce la adicción a la nicotina

Para comenzar, nos basaremos en la conclusión de uno de los estudios del Royal College of Physicians, en el cual hablan sobre la Reducción de daños en la adicción a la nicotina. En este exponen que la reducción de daños es una parte fundamental de la medicina (e incluso de la vida cotidiana), pero que en el caso del tabaquismo no se ha aplicado. Con esto concluimos que pese a que a niveles prácticos y de salud lo mejor sería no consumir ningún producto que supusiera la combustión e inhalación, el vapeo aporta muchos beneficios a aquel que es fumador convencional, para ser exactos, es “un 95% menos dañino” (King’s College de Londres, 2019). Por lo que no es tan malo vapear.

Según estudios como el recién mencionado del King’s College de Londres, en Reino Unido el tabaquismo ha ido decayendo en los últimos años, habiendo sólo un poco menos del 15% de los adultos fumando.

Sin embargo, “sólo el 4% de los intentos de dejar de fumar a través de los Servicios para dejar de fumar en Inglaterra se realizan con cigarrillos electrónicos”, aún cuando hay estudios que han descubierto que “los cigarrillos electrónicos, cuando se combinan con el apoyo presencial, son hasta dos veces más efectivos para dejar de fumar que otros productos de reemplazo de nicotina, como los parches o chicle”.

No induce a jóvenes a fumar

Además, la ANMAT en el 2011 señaló que el “uso de estos dispensadores” podía “inducir en nuevos usuarios una dependencia a la droga” y que había que “tratar de impedir que nuevas generaciones de jóvenes se inicien al tabaquismo”. Este fue uno de los motivos de la prohibición del tabaco en Argentina. Sin embargo, el estudio de KCL, afirma que “entre los jóvenes que nunca han fumado, sólo el 0,2% usa cigarrillos electrónicos con regularidad”, siendo estas cifras bajísimas.

Así pues, con estos dos resultados, se resuelven dos de los grandes problemas por los que ha sido atacado el vapeo, viendo realmente si el cigarro electrónico es malo: 

  1. Sus beneficios o perjuicios respecto a fumar tabaco, y 
  2. Si incita a jóvenes no fumadores al consumo de tabaco. 

El mayor problema con el que se encuentra el mundo del vapeo es que únicamente se buscan sus riesgos, cuando lo idóneo sería compararlo con el consumo de cigarrillos tradicionales, puesto que fue un producto creado para fomentar la reducción de este, y como hemos comentado, sí hay estudios que demuestran que es mejor en un gran porcentaje (exactamente un 95%).

Para concluir, queremos concienciar acerca del concepto de “Reducción de daños” aplicado y aconsejado en las intervenciones en usuarios de drogas. El tabaco está clasificado como droga según la Organización Mundial de la Salud. ¿Por qué no se aplica la “Reducción de daños” aquí? ¿Por qué se imponen cada vez más impedimentos en el mundo del vapeo? Aún así, no hay mejor forma de atacar que con resultados, y los estamos obteniendo, evidenciando la afirmación sobre si el cigarro electrónico es malo.

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